¿No conoces con cuánta potencia debe tener una fumigadora? Al momento de elegir una motopulvizadora debemos tener en cuenta varios aspectos entre ellos el rango de la potencia.
La potencia requerida para una fumigadora depende de varios factores, incluyendo el tipo de cultivo, el área a tratar y el método de aplicación de pesticidas. En términos generales, la potencia de una fumigadora se refiere a la capacidad del motor para generar la presión necesaria para pulverizar los pesticidas de manera efectiva sobre el área deseada.
Regularmente, se aconseja que una fumigadora cuente con suficiente potencia para crear la presión necesaria y así esparcir los pesticidas de forma eficaz sobre la zona que se desea tratar. Para ello, la fuerza del motor debe estar en un intervalo de 120 a 160 caballos de fuerza.
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¿Cuánta potencia debe tener una fumigadora para un jardín?
La potencia requerida para una fumigadora en un jardín dependerá principalmente del tamaño del área a tratar y del tipo de vegetación que se encuentre en él.
Para jardines de tamaño modesto, una motopulverizadora con una potencia de alrededor de 2 a 5 caballos de fuerza (HP) suele ser suficiente para realizar tareas de fumigación de manera efectiva.
Estas fumigadoras más pequeñas son convenientes y manejables para áreas limitadas, como jardines residenciales o huertos caseros.
Sin embargo, si el jardín es grande o si se necesitan realizar tratamientos más intensivos, como el control de plagas en árboles frutales o arbustos grandes, podría ser necesario contar con una fumigadora de mayor potencia, en el rango de 5 a 10 HP.
Este tipo de fumigadoras proporcionan una presión de pulverización más consistente y pueden cubrir un área más extensa con mayor eficiencia.
Es esencial considerar también otros factores, como la facilidad de manejo y la precisión de la aplicación. En jardines con espacios estrechos o plantas delicadas, una fumigadora más ligera y maniobrable puede ser preferible, incluso si su potencia es un poco más baja.
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¿Cómo elegir una fumigadora?
Elegir la fumigadora adecuada es crucial para garantizar un control efectivo de plagas y enfermedades en cultivos, huertos o jardines.
Las maneras de utilizar y aplicar una fumigadora pueden cambiar según lo que se necesite y las distintas circunstancias que haya en la tarea. Aquí te explicaremos cómo elegir una fumigadora según lo que necesites para tu tarea específica.
- En primer lugar, es fundamental evaluar el tamaño del área que se va a tratar. Para áreas pequeñas, una fumigadora manual o de mochila puede ser suficiente, mientras que para áreas más grandes se requerirá una fumigadora montada en un vehículo o remolque.
- Otro aspecto importante es el tipo de producto químico que se va a aplicar. Algunas fumigadoras están diseñadas para trabajar con ciertos tipos de pesticidas, herbicidas o fertilizantes, por lo que es crucial elegir una que sea compatible con los productos que se utilizarán.
- Su potencia y capacidad de la fumigadora también son consideraciones clave. Se debe seleccionar un modelo con la potencia adecuada para garantizar una pulverización uniforme y completa, especialmente en terrenos irregulares o con vegetación densa.
- La comodidad y facilidad de uso también son aspectos a tener en cuenta. Una fumigadora con características ergonómicas y controles intuitivos hará que el trabajo sea más eficiente y menos fatigoso para el operador.
- Además, es esencial considerar la durabilidad y calidad de construcción de la fumigadora. Optar por marcas reconocidas y modelos bien construidos puede garantizar una larga vida útil y un rendimiento confiable a lo largo del tiempo.
Al elegir una fumigadora, es importante considerar su propósito específico, ya sea para la agricultura, desinfección o aplicaciones en el ámbito pecuario.
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Usos relacionados con la ganadería
Estos dispositivos, conocidos como "bañaganados", son herramientas ligeras y fáciles de transportar. Por lo general, se emplean fumigadoras de dos tiempos, ya que se utilizan en ciclos cortos de trabajo y a baja presión, lo que permite que sean manejadas por un solo operario.
En estas situaciones, se aconseja optar por motopulverizadora de espalda o modelos semi estacionarios a gasolina.
Limpieza y desinfección
Estas herramientas se emplean para combatir insectos dañinos y virus. Pueden ser de tipo portátil, como las fumigadoras de espalda, que son fácilmente transportables. En ocasiones, se prefieren las fumigadoras manuales o eléctricas para su uso en áreas cerradas.
Para lograr una aplicación más uniforme y eficaz, se recurre a las motopulverizadora de espalda con motor, lo que garantiza una operación más consistente y no depende ni de una conexión eléctrica ni de la fuerza del operador.
Aplicación de pesticidas en cultivos
Al abordar estas tareas, es esencial considerar diversos aspectos que influyen en la elección del equipo adecuado. Entre estos factores se encuentran el tamaño y estado del terreno, la frecuencia de uso, la presión y volumen de líquido necesarios, así como el tipo de alimentación requerido, ya sea eléctrica o de combustible.
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Inicialmente, es importante determinar qué tipo de fuente de energía se necesita. En el caso de los cultivos, es común emplear motores a gasolina, especialmente en áreas remotas sin acceso a la red eléctrica.
La selección del motor debe realizarse según los requerimientos específicos de presión y volumen de líquido para llevar a cabo la tarea. Por lo general, las fumigadoras estacionarias se equipan con motores de 6.5hp o 5.5hp, mientras que las fumigadoras de espalda suelen contar con motores de entre 25cc y 36cc de cilindrada.
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¿Qué tipos de fumigadoras hay?
Existen varios tipos de fumigadoras diseñadas para satisfacer diferentes necesidades y contextos de aplicación.
Nos referimos a tres categorías de equipos de fumigación agrícola utilizados en las actividades de campo:
Fumigadoras manuales
Las fumigadoras manuales también son llamadas mochilas de pulverización. Estas herramientas incluyen un recipiente que se ata a la espalda con correas, un brazo con boquilla(s) y una manija para bombear.
Se usa en zonas de cultivo reducidas, de complicado acceso para los equipos grandes o para tratamientos en puntos específicos. A pesar de su simplicidad, también necesita ser ajustado correctamente para asegurar que la pulverización sea efectiva.
Fumigadoras de tractor
Este tipo de fumigadora de presión conectada a un tractor se usa para cubrir grandes extensiones de cultivo. Cada componente se conoce como:
- Depósito de pulverización.
- Bomba, el sistema de filtración.
- Medidor de presión.
- Sistema de control
- Brazo de pulverización.
- Boquillas.
Requiere atención y cuidado debido a la complejidad del equipo. Existen dos variedades de bombas que se ajustan según las preferencias de cada individuo: las centrífugas y las de desplazamiento positivo.
Las primeras desplazan grandes volúmenes a baja presión, mientras que las segundas permiten presiones más altas con volúmenes menores.
Los tanques de mejor calidad están fabricados en plástico para prevenir la contaminación, aunque también pueden ser de metal galvanizado o de fibra de vidrio. Una boca ancha con filtro y un cierre hermético hacen más sencillo el proceso de llenado del depósito con la mezcla para pulverizar.
Fumigadoras agrícolas autopropulsadas
Este tipo de fumigadora es versátil porque puede realizar diversas funciones, como la aplicación de diferentes tipos de productos como agua, fertilizantes o pesticidas. Tiene la capacidad de dispersar compuestos específicos a través de las boquillas del equipo.
El mercado de las pulverizadoras autopropulsadas está compuesto por diversas marcas que ofrecen una amplia gama de modelos. Estos son equipos altamente efectivos en la pulverización para el control de malezas que han desarrollado resistencia al glifosato.